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Adolescencia tardía

Tras la preadolescencia y la adolescencia media, llega este periodo para reconciliarse consigo mismo, desarrollar sus valores y reconectar con la familia.

Tras un periodo centrado en el si mismo y su aspecto, donde las relaciones con los amigos es lo más importante y los padres se quedan en un 2º plano; Habiéndose ya iniciado el pensamiento abstracto. moral y filosófico ahora se encuentra con la ultima etapa de la adolescencia.

¿Qué es la adolescencia tardía?

La Adolescencia tardía (17-19 años) se caracteriza por el aumento de la preocupación por la integración social y la independencia económica. Desarrollo físico completo y estatura adulta alcanzada. Los comportamientos de riesgo se reducen y los vínculos de pareja se vuelven más estables. Un comportamiento más maduro y responsable va acompañado de la reanudación del diálogo con la familia.

Pareja de adolescentes hablando en la calle

De los años 30 a los 50 del siglo pasado, la pubertad o desarrollo físico y psicológico solía coincidir lo el inicio de la vida laboral y la búsqueda de la independencia familiar. En la actualidad, los adolescente desarrollados de forma total tanto física como mentalmente siguen estudiando o no tienen oportunidades laborales y por tanto la oportunidad de independizarse, esto conlleva a que sigan siendo como niños en le plano social. Te dejamos un artículo sobre historía de la adolescencia. sigue leyendo…

El desfase entre el final temprano de la pubertad y el retraso en el desarrollo psicosocial crea las condiciones para la aparición de la inadaptación psicosocial. El adolescente quiere comportarse como un adulto, pero se lo prohíben.

Si esas aspiraciones se reprimen, se transforman en trastornos psicosomáticos, y si se realizan, se convierten en comportamientos de alto riesgo.

Con ello aparece la prolongación de la adolescencia tardía.

Características de la adolescencia tardía

Grupo de adolescentes de excursión, comiendo.

Las características más típicas de esta fase de la adolescencia son:

  • Refuerza su identidad.
  • Es capaz de retrasar la gratificación.
  • Puede razonar de forma más independiente.
  • Es capaz de expresar sus ideas adecuadamente a través de las palabras.
  • Tiene un sentido del humor más desarrollado.
  • Intereses más estables.
  • Más estable emocionalmente.
  • Puede tomar decisiones con total autonomía.
  • Es capaz de hacer compromisos.    
  • Se enorgullece de sus actividades.
  • Tiene mayor confianza en sí mismo
  • Ahora se preocupan por los demás, familia incluida.   
  • Su propensión al trabajo se vuelve más definida.
  • La atención al futuro crece.  
  • Comienza a pensar en su papel en la vida.
  • Está involucrado en relaciones importantes.   
  • La identidad sexual se consolida.     
  • Es capaz de amar de una manera más afectiva y sensual.    
  • Aumentan las capacidades intuitivas.    
  • Da más peso a la dignidad personal y a la autoestima.   
  • Tiene la capacidad de establecer objetivos personales y alcanzarlos.     
  • Hay una mayor aceptación de las tradiciones e instituciones socioculturales

Adolescencia OMS definición

La OMS (Organización Mundial de la Salud)

La adolescencia segun la OMS (Organización Mundial de la Salud) define al “adolescente” como aquella persona cuya edad está comprendida entre los 10 y 19 años.

En los últimos años se ha hablando sobre una revisión de esta edad, extendiéndola hasta los 24 años, por las causas anteriormente comentadas. El nombre asociado que se le ha dado a esta nueva etapa ha sido adolescencia tardía.

Adolescentes tadíos jugando a la consola sentados en el sofá

Transición obligatoria y a veces complicada entre la infancia y la edad adulta, la adolescencia ha generado a menudo un debate entre los especialistas, que distan mucho de ser unánimes en cuanto a su definición o duración.

 Según un estudio australiano publicado en la revista The Lancet Child and Adolescence Health, esta última debe ser revisada.

Si hasta ahora la adolescencia terminaba oficialmente a los 19 años, este límite debería retrasarse hasta los 24, según investigadores de la Universidad de Melbourne. Según ellos, esta transición de niño a adulto, que es la adolescencia, ocupa una gran parte de la vida. Pudiendo ocasionar adultos que se quedan en la adolescencia para siempre.

Por lo tanto, debe ajustarse a ciertos parámetros actuales. «En lugar de 10 a 19 años, una definición de 10 a 24 años se ajusta más al crecimiento de la adolescencia y a la comprensión popular de esta fase de la vida», dicen los autores del estudio.

Argumentos sociales y biológicos

Grupo de amigos paseando por la playa y bebiendo alcohol

¿Qué factores hay que tener en cuenta para justificar esta nueva situación? Los argumentos que se esgrimen son principalmente sociales. La prolongación de la escolaridad, el matrimonio tardío y la paternidad han cambiado la percepción popular de la adolescencia, dicen los expertos.

La edad de la pubertad ha bajado de los 14 a los 10 años a medida que la salud y la nutrición han mejorado en los países más desarrollados. En los países industrializados, la edad media de la primera menstruación de las niñas ha descendido 4 años en los últimos 150 años, situándose en torno a los 12-13 años.

Hay otros argumentos biológicos a favor de la prolongación de la adolescencia. Los investigadores mencionan, en particular, el desarrollo cerebral que continúa más allá de los 20 años, trabajando más rápido y con mayor eficacia. O las muelas del juicio que algunas personas no tienen hasta los 25 años.

Desde los años 70, hay el doble de jóvenes de entre 15 y 24 años que se incorporan al mercado laboral que de personas mayores (55-64 años) que lo abandonan. Además, las modalidades del paso a la edad adulta se han ido desintegrando.

Los adolescentes de nuestras sociedades modernas adquieren múltiples derechos a diferentes edades sin llegar a obtener un nuevo estatus: mayoría de edad a los 18 años, cuenta bancaria a los 13 o a los 14-18 según el cas o o, fin de la pediatría en el hospital a los 15 años, por no hablar de las edades requeridas para conducir un moto o coche etc.

Esta situación de confusión entre dos edades es característica de las sociedades occidentales modernas. No existe en las culturas tradicionales de África, Sudamérica o Asia. La edad en la que estas sociedades sitúan el paso de la infancia a la edad adulta se sitúa generalmente en torno a la pubertad fisiológica. Las modalidades de paso pueden ser más o menos complejas.


Masáis pasando por el ritual de niñez a edad adulta

Pero, en todos los casos, la transición es clara y se produce sin «crisis». Es objeto de rituales más o menos elaborados y más o menos largos, según la sociedad, que determinan un antes y un después, simbolizando la adquisición de un nuevo estatus social a los ojos de todos.

Hasta hace poco, en nuestras sociedades, el servicio militar o la entrada en la vida laboral eran hitos visibles. Hoy en día, la entrada en la vida laboral ya no marca el paso a la edad adulta y a menudo está desfasada del cambio puberal y se presenta como un proceso no definido en el tiempo y el espacio. Los cursos de formación continua se suceden.

La independencia financiera se retrasa cada vez más y va acompañada, con gran ambivalencia, de una exigencia de responsabilidad a los jóvenes. Por otro lado, nunca se plantea la cuestión del relevo generacional. Parece que si no se resuelve el problema del lugar que ocupan los jóvenes, los límites de su reconocimiento se alejan.

Esta incapacidad de nuestras sociedades para gestionar el paso de la infancia a la edad adulta podría constituir, de hecho, una nueva definición de la adolescencia. Cómo sorprenderse, en una situación así, del aumento de las manifestaciones de desconcierto, incluso de angustia, que presentan muchos jóvenes. Este desorden parecen estar muy directamente relacionados con los que muestran los adultos.

En conclusión, independientemente de la longitud en el tiempo, la adolescencia es una etapa de la vida en la que la persona se transforma de manera completa, en cada una de las facetas que lo conforman. Por tanto, hay que darle la importancia que merece ya que ellos serán los adultos del futuro.

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